La Renta Básica Universal y su repercusión en el arte, cultura, entretenimiento y ocio.
Durante los años más recientes ha tomado fuerza la discusión acerca de si la Renta Básica Universal es buena idea o no. Los que la rechazan regularmente dan argumentos demasiado elementales, sobre todo en países como el nuestro donde llegan a decir que hará más flojos a los mexicanos. Sin tener una visión de que reduciría drásticamente la desigualdad social y con ello muchos de los problemas que conlleva.
La Renta Básica Universal es una cuota, un salario por el simple hecho de ser ciudadano de un lugar determinado. Un sueldo mensual por ser mexicano. Las razones cada vez son más profundas y necesarias. Entre ellas la tecnificación y automatización de muchas actividades que prescindirán de la mano de obra de un ser humano. Muchos empleos tradicionales desaparecerán y con ello muchas personas dejarán de ser necesarias en varias cadenas productivas.
Al mismo tiempo las jornadas laborales se reducirán y el poder adquisitivo seguirá perdiendo valor. Los Estados cada vez más adelgazados están dejando de cumplir su meta de bienestar social por ser cada vez más caro sostener infraestructuras como las de salud y educación. Incluso sería una gran ventaja porque le saldría más barato al Estado entregar una renta básica a cada ciudadano que seguir sosteniendo muchas estructuras que ya no son viables. Y cada ciudadano pagará por esos servicios donde más le convenga o prefiera, ya con dinero asegurado en su bolsa. Aunque siempre el Estado tiene que ser garante de la vida pública y social incluso en el más salvaje neo-neoliberalismo.
En algunas ciudades y países ya se está poniendo a prueba la Renta Básica Universal. Como en Finlandia o la ciudad canadiense de Ontario. Y parece que aligera muchas de las cargas de lo Estados tan adelgazados por las políticas económicas liberales y neoliberales. Parece que se genera un estado de bienestar entre la población al asegurar ingresos básicos. Sin que esto signifique en muchos casos que dejen de lado la productividad, al contrario, una base de seguridad permite tener más confianza para seguir produciendo.
Al igual que la reducción de las jornadas laborales, la renta básica permitirá que las personas sean más conscientes del tiempo libre y la necesidad de acercarse a actividades de ocio que generen entretenimiento y cultura. Esta iniciativa beneficiará mucho a las industrias creativas y que tendrán que atender a más personas con el tiempo disponible y la disposición de enriquecer su vida interior a través del arte.